¿Qué pasa con lo de los neandertales?

Esta semana ha salido a la luz una de las noticias más importantes para la disciplina histórica y para la ciencia en general del año. Sin embargo, no hemos visto mucho seguimiento por parte de los medios, ni tweets de políticos agradeciendo a los descubridores. En lugar de ello hemos seguido discutiendo sobre el himno de Marta Sánchez y demás pollas en vinagre.
Hemos analizado los motivos que han podido llevar a este vacío mediático y, siendo optimistas, hemos entendido que quizá se deba a que no se entiende la importancia que en realidad tiene. Así que vamos a explicarla a nuestra manera.
La noticia es la siguiente:
Titular de la versión digital de La Vanguardia

LA NOTICIA
Hasta ahora se pensaba que los homo sapiens eran la crème de la crème, los únicos capaces de hablar, crear obras artísticas y filosofar, mientras que los neandertales, que convivieron con ellos durante algunos miles de años, encarnaban la fuerza bruta y el retraso mental. Dicho de otra manera: mientras un buen representante del sapiens sapiens podría ser Leonardo Da Vinci, el mejor de los neandertales habría tenido un intelecto cercano al de Álvaro Ojeda.
Desde hace algún tiempo, científicos y arqueólogos tenían la mosca detrás de la oreja y sospechaban que los neandertales no debían haber sido tan idiotas como nos imaginábamos, sin embargo, carecían de pruebas suficientes para demostrarlo.
Esto ha cambiado gracias a João Zilhão, de la Universitat de Barcelona, y su equipo (junto a otros investigadores de distintas universidades: García Díez, Alcolea González, Hoffamann, Standish, Pettit, Milton...) pues han logrado fechar con exactitud algunas manifestaciones artísticas que hasta ahora se suponía que eran obra de los sapiens.
El problema reside en que estas obras de arte se habían datado en base a pruebas de carbono 14, lo que conlleva un margen de error lo bastante amplio como para que pudieran considerarse de un período en que convivieron sapiens y neandertales o un período en que en la península Ibérica tan solo vivían los neandertales.
Ahora estas mismas manifestaciones han sido sometidas a una novedosa prueba, la técnica de uranio-torio, que es capaz de fechar con mayor exactitud que el carbono 14. Y aquí ha llegado la sorpresa: todas han sido datadas alrededor de hace 65.000 años, período en que en la península solo vivían los neandertales, aún faltaban varias decenas de miles de años para que los sapiens llegasen a estas latitudes.

FASE DE NEGACIÓN
Ahora bien, todo gran descubrimiento científico conlleva una primera fase de negación, y los enteraos se lanzan a argumentar contra el descubrimiento. Sin embargo, el equipo ha tomado precauciones y ha previsto algunas de esas argumentaciones:

1. Que haya una obra en un lugar de la península que sea neandertal no quiere decir que los neandertales peninsulares realizasen obras artísticas de forma general.
Las obras de arte analizadas son de distintos puntos de la península tan distantes como Cantabria, Málaga, Cáceres o Cartagena.
Conchas perforadas de la cueva de Los Aviones
(Cartagena)

2. Que hiciesen cuatro rayajos en una pared no quiere decir que tuvieran la intención de hacer arte.
No solo se han analizado pinturas rupestres, también se han analizado otros elementos como conchas perforadas y decoradas que denotan que no solo pintaban, sino que además decoraban su cuerpo con collares y otros abalorios.

3. Aún así, puede ser que lo hicieran en un momento muy determinado, algo así como una moda...
En algunas de las cuevas con pinturas analizadas se ha registrado una actividad que se extendió en el tiempo durante miles de años. Esto quiere decir que no es algo esporádico, sino que formaba parte de su cultura.

FASE DE ACEPTACIÓN
El enterao acepta que los neandertales hacían arte, pero aún se resiste a admitir la trascendencia del descubrimiento: venga, vale, pintaban, ¿y eso qué? ¿Qué demuestra?
Lo que viene a demostrar esto es que los neandertales eran mucho más inteligentes de lo que pensamos: la creación artística se asocia a un tipo de pensamiento abstracto, un pensamiento simbólico. Los neandertales tenían unas capacidades cognitivas muy superiores a las que hasta ahora se le suponían. Y es más, si tenían un pensamiento simbólico, significa, según los expertos, que además poseían un lenguaje. Dicho de otra manera: si hasta ahora pensábamos que los neandertales eran como Homer Simpson, lo que hemos hecho ha sido sacarle la cera del cerebro.
En este momento, el enterao acepta la noticia y, henchido de orgullo patrio, realiza sus propias interpretaciones: 
Efectivamente, esto arroja varias premisas interesantes: las pinturas analizadas serían las pinturas rupestres más antiguas del mundo, pero aún habría que analizar con la misma técnica otras muchas. Y desde luego, quiere decir que no fueron hechas por sapiens, sino por neandertales. Ahora bien, eso de que los primeros artistas del mundo fueran españoles... ni llevaban DNI, ni tenían conciencia de eso que usted llama España.
Mil gracias a @JPablo_gm por este maravilloso gif.
CONCLUSIONES
Los neandertales no eran tontos, y los sapiens sapiens no somos el centro del Universo.
El estudio abre una herida en nuestro orgullo de sapiens sapiens, y todavía harán falta algunos años hasta que se reconozca oficialmente, pero parece que nuestros abuelos no fueron los únicos inteligentes y capaces de cosas tan maravillosas como el lenguaje y el arte.

El estudio: "U-Th dating of carbonate crusts reveals Neandertal origin of Iberian cave art", en Science.


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