La huella de Vere Gordon Childe


El 19 de octubre de 1957, Vere Gordon Childe, con 65 años, murió.

Después de su muerte se publicaron las siguientes frases:
  • V. Gordon Childe era "el prehistoriador más grande de Gran Bretaña y probablemente del mundo" (Stuart Pigott).
  • "Probablemente el más conocido y citado arqueólogo del siglo XX" (Randall H. McGuire)
Son solo dos de entre decenas de frases elogiosas a su figura. Ahora bien, ¿cómo se convirtió en una figura tan relevante?


«La Revolución Neolítica»
El nombre de Childe siempre aparece ligado a ese concepto, acuñado por él mismo en 1923. Hace alusión al primer cambio relevante en la forma de vida de los seres humanos: de nomadismo a sedentarismo, y de economía principalmente recolectora a implantación de la agricultura. Así, tendríamos un modo de vida paleolítico (depredador) frente a un modo de vida neolítico (productor). Por ello, también se ha llamado a veces Revolución Agrícola.

Las ciudades, la vida urbana y la organización social tomaron su parte en esta «revolución», por lo que también hablaría de «revolución urbana». Las revoluciones neolítica y urbana de Childe fueron muy discutidas, pero parece que pudieron romper el esquema historicista predominantes hasta entonces y llevar así la arqueología prehistórica a unas bases metodológicas y teóricas más sólidas.

Visto ese punto tan importante, habría que conocer un poco más a Childe. 

Materialismo histórico
No es posible entender a Vere Gordon Childe sin el socialismo. Ideología y obra científica van de la mano para el australiano. Así, en 1933, poco tiempo después de la llegada de Hitler al poder en Alemania, Childe dio el discurso «¿Es la Prehistoria práctica?», un alegato contra el uso malicioso de las tesis de Gustaf Kossina. Las ideas de este arqueólogo alemán servían como base para los nazis sobre la que construir un discurso de superioridad racial, y para Childe «la prehistoria demuestra que lo que se llama civilización es producto de la tradición colectiva […] a la cual contribuyen todos los pueblos».

Un año más tarde, Childe visitó la URSS y estudió la arqueología que allí se desarrollaba. Volvió y adoptó ciertas posiciones de las escuelas marxistas. Así, dijo: «Por fortuna, la pretensión de considerar exclusivamente a la historia política ya no es incontrovertible. Marx insistió en la importancia primaria que tienen las condiciones económicas, las fuerzas sociales de producción y las aplicaciones de la ciencia, como factores en el cambio social. Su concepción realista de la historia viene ganando aceptación en círculos académicos muy alejados de las pasiones de partido que encienden otros aspectos del marxismo», y «Para mí, el marxismo significa una forma de acercamiento y un dispositivo metodológico para la interpretación de materiales históricos y arqueológicos».

Indiana Jones recomienda leer a Vere Gordon Childe.

La cultura y la herencia social
«Lo que los padres imparten a sus hijos no son simplemente las lecciones de su propia experiencia personal, sino algo mucho más amplio: la experiencia colectiva del grupo. Tal es la tradición que pasa de generación en generación, cuyo método de transmisión, con ayuda del lenguaje, parece ser una peculiaridad de la familia humana. Y esta peculiaridad constituye la diferencia vital definitiva entre la evolución orgánica y el progreso humano» (Childe).

Childe buscó enlazar la arqueología con los análisis etnográficos, y precisamente la herencia social que señala en esa cita es la que permite que la aportación individual se acabe convirtiendo en parte del conjunto social, creando la cultura, tal y como la entendería él.

Pero siempre le preocupó mucho que se malinterpretasen sus teorías, y negó que su concepto de pueblo tuviera rasgos raciales y, precisamente, incidió en que el desarrollo cultural viene gracias a la conexión entre grupos humanos y el trasvase de ideas. Con la expansión del nazismo, recalcó la importancia estudiar la historia de la humanidad frente a los pueblos.

Childe volvió a Australia tras 36 años.
El 24 de abril de 1957 le fue nombrado
Doctor Honorífico de la Universidad de Sydney.
Los últimos pasos
«No debemos imaginar que elaboraban una teoría sobre la magia o una teología y luego actuaban sobre esa base. Las profundas emociones suscitadas por las crisis recurrentes de la vida y de la muerte no hallaban expresión en palabras abstractas o en “juicios”, sino en actos concretos y apasionados. Los actos eran las ideas, y no la expresión de estas últimas» (Childe).


Desde 1945 hasta 1957 dirigió el Instituto de Arqueología de Londres y continuó su actividad científica y divulgativa.

Ese es un punto interesante: los escritos de Childe desprenden cierto énfasis divulgativo, así que se dejan leer incluso por no iniciados. Quizá estas ganas de mostrar a la gente lo que era la arqueología y la prehistoria, fue lo que le llevó a aparecer en programas de televisión. Aquí os dejamos un vídeo curioso para que disfrutéis, no sin antes señalar que hoy en día, con tanto Canal de Historia y tan poco programa decente, llevar a tres figuras así a la televisión para hacer un programa de 30 minutos parece una locura. El programa es presentado por Glyn Daniel, miembro del St John's College (Cambridge), y participan Sean P O Riordain (arqueólogo en el University College Dublin), sir Mortimer Wheeler (Universidad de Londres, uno de los creadores de uno de los métodos arqueológicos más conocidos, el Wheeler-Kenyon) y Vere Gordon Childe.


De Childe destaca, junto a todo lo señalado, su capacidad de síntesis, que le llevó a ser conocido como el 'Gran Sintetizador de la prehistoria europea y de Próximo Oriente'. Su conocimiento de varias lenguas europeas dio pie a trabajos donde vertía una visión de conjunto de la prehistoria europea, que significaron un punto de partida para posteriores investigaciones por toda Europa. Además, es uno de los principales difusores de la arqueología como rama propia de la historia.

El final de este titán, pese a todo, estuvo envuelto inicialmente en cierto misterio. Aunque se dijo que se había caído por un precipicio, en la zona en la que Childe cayó se encontraron su sombrero, sus anteojos, una brújula, su pipa y su abrigo.
Además, días antes de su muerte envió a su amigo Grimes una carta donde decía: "Un accidente puede sobrevenir fácil y naturalmente en un acantilado de la montaña". Su texto cerraba así: "La vida termina mejor cuando uno está alegre y fuerte".


REFERENCIAS
  • The Archaeology of V. Gordon Childe (ed. David R. Harris), The University of Chicago Press, 1994.
  • Coloquio V. Gordon Childe. Estudios sobre la revolución neolítica y la revolución urbana. Universidad Nacional Autónoma de México. (ed. Linda Manzanilla). México. 1988.
  • S. Green: V. Gordon Childe: a biographical sketch. 
  • http://metahistoria.com/gordon-childe/
  • http://arqueoblog.com/vere-gordon-childe-un-revolucionario/
  • https://introduccionalahistoriajvg.wordpress.com/2013/04/02/%E2%9E%BB-vere-gordon-childe-1892-1957/
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